Cómo el poder de la tecnología puede ayudar a reconciliar las ganancias y el planeta

La transformación digital de la industria que ha sido acelerada por la pandemia Covid-19 está creando una oportunidad única en la vida para establecer un mejor equilibrio entre la sostenibilidad y el crecimiento empresarial.

Los eventos del año pasado han presentado a las empresas desafíos que antes hubieran sido difíciles de imaginar. A pesar de esto, entre la incertidumbre y la imprevisibilidad, muchos líderes empresariales han encontrado tiempo para reflexionar sobre sus prioridades. Al hacerlo, han surgido dos temas claros. Primero, la importancia de aprovechar la tecnología para permitir formas de trabajo más eficientes. En segundo lugar, una nueva comprensión de la importancia del comportamiento empresarial en la construcción de un mundo más sostenible.

El resultado tangible de estas reflexiones se puede resumir de manera bastante simple: la pandemia Covid-19 ha actuado como una incubadora, impulsando a las empresas a adoptar la transformación digital. Ahora es el momento de aprovechar esta oportunidad e integrar la transformación de manera indisoluble con la sostenibilidad.

Esta era de transformación digital nos presenta una oportunidad única en la vida para lograr un mejor equilibrio entre la sostenibilidad y la rentabilidad empresarial general. Ya estamos comenzando a ver un cambio claro en las prioridades comerciales de estar puramente impulsadas por las ganancias a incorporar una agenda de impacto social positivo, con muchas organizaciones globales de alto perfil asumiendo compromisos audaces para reducir drásticamente sus emisiones de carbono. Esto es algo de lo que deberíamos esperar ver más durante el próximo año, especialmente a medida que las redes sociales y el mayor escrutinio público aumentan la presión sobre las organizaciones para que tomen una postura.

Con todo este ruido positivo que se hace en torno a la sostenibilidad en los entornos empresariales, el enfoque ahora debe pasar de la conversación a la acción. Debemos explorar cómo estos compromisos pueden cumplirse de una manera que sea duradera y tenga un impacto positivo a largo plazo en los resultados de una empresa. Aquí es donde entran las nuevas tecnologías.

La aplicación de tecnologías como 5G, Internet de las cosas (IoT) e inteligencia artificial (IA) será fundamental a medida que trabajamos para reducir las emisiones nocivas y avanzar hacia una economía sin carbono, más resistente y preparada para el futuro. Además de ser un impulsor clave de modelos comerciales más sostenibles, la adopción de nuevas tecnologías suele estar vinculada a objetivos comerciales específicos, incluido el aumento de la productividad y la producción.

Si bien estas tecnologías y los beneficios que brindan son independientes del sector, puede ser útil imaginarlas dentro de un contexto particular. Tomemos la manufactura, por ejemplo. La introducción de 5G en la fabricación permite la creación de fábricas inteligentes. El nivel de automatización permitido por las fábricas inteligentes permite enlaces en tiempo real a los pronósticos de demanda de los clientes, capacidad de producción flexible y menores costos de producción. Una mayor visibilidad y un ritmo de producción mejorado son factores clave que contribuyen a aumentar significativamente los niveles de productividad.

Además de los beneficios comerciales que la 5G brindará a los fabricantes, las fábricas inteligentes también se convertirán en lugares de trabajo más seguros que en el pasado. Con una mayor conectividad y aprendizaje automático, se eliminará la necesidad de cableado peligroso o lecturas de máquina arduas, lo que contribuirá a niveles de seguridad más altos.

Los beneficios comerciales son claros, pero también debemos considerarlos en el contexto de la sostenibilidad. Un informe reciente del operador líder de telecomunicaciones O2, ‘Un futuro conectado más verde’, estima que la aplicación de 5G a la fabricación tiene el potencial de ahorrar 40 megatoneladas de emisiones de carbono para 2035.

Para casi todos los sectores en el Reino Unido y más allá, la adopción generalizada de nuevas tecnologías puede tener un impacto positivo tanto para las empresas como para el medio ambiente. Es hora de replantear la sostenibilidad y la rentabilidad desde objetivos en conflicto hasta prioridades empresariales críticas que coexisten en armonía para impulsar un crecimiento económico equitativo.

Los beneficios de la tecnología no se detienen ahí. Además de crear modelos comerciales más ecológicos, la tecnología puede ayudar a las organizaciones a ser empleadores mejores y más flexibles. Un aspecto positivo de la pandemia fue que obligó a los empleadores a apoyar a su fuerza laboral con la tecnología adecuada para trabajar de forma remota. Esta es una tendencia que parece que persistirá más allá de la pandemia.

Ahora que las estructuras de trabajo a distancia están firmemente establecidas, algunos pueden argumentar que los días de los ejecutivos de la jet-set han terminado. Con muchas reuniones realizadas a través de videollamadas, los viajes de larga distancia se pueden minimizar y los empleados pueden elegir viajar a la oficina con menos frecuencia, quizás solo cuando tienen una reunión importante. Este volumen reducido de viajes ayudará a reducir significativamente las emisiones de carbono no solo en el Reino Unido, sino en todo el mundo.

Un mundo conectado es un mundo más sostenible. Trabajemos juntos para romper los viejos patrones y dar vida a esta visión.

Sigue habiendo mucha incertidumbre para las empresas a medida que navegamos para salir de la pandemia de Covid. Hay una cosa de la que podemos estar absolutamente seguros: el cambio climático no va a desaparecer. Cada organización en todo el mundo tiene un papel importante que desempeñar y le insto a que haga lo correcto para sus clientes y el mundo y considere cómo la tecnología podría hacer que su organización sea más ecológica.

Bhushan Patil es vicepresidente senior para EMEA en Tech Mahindra